Para la mayoría de propietarios de un solo dominio el pensar en adquirir un servidor propio es claro indicio de ganas de verse envuelto en un montón de problemas y gastos innecesarios: adquisición de hardware, software, firewalls, alquiler de líneas T1, contratación de administradores de sistema, etc., etc. Estamos hablando de, como mínimo, un millón y medio de pesetas frente a las 75.000, más o menos, que cobra un proveedor de servicios por alquilar espacio en su servidor.
Ahora bien, existen casos en los que disponer de un servidor propio es necesario o muy conveniente. Por ejemplo:
- Cuando recibimos cientos de miles de visitas diarias.
- Cuando necesitamos hacer uso de software especial o programas muy sofisticados que nuestro proveedor no tiene instalados.
- Cuando necesitamos dar acceso a los datos desde un mainframe.
- Cuando deseamos proveer de espacio web y otros servicios a terceras personas.
- Cuando poseemos varios dominios.
Si deseas tener un servidor propio "en casa", uno que puedas ver, tocar y admirar (y reparar), como antes señalaba deberás contar con un presupuesto elevado, incluso en el caso de que tú mismo seas capaz de administrarlo. Sin embargo, existe una alternativa mucho más económica, intermedia entre el barato servidor virtual sobre el que no tienes ningún control y el carísimo servidor propio que puedes acariciar en casa: el servidor dedicado.
En palabras sencillas un servidor dedicado es una maquina alquilada por ti en su totalidad, que albergará todos aquellos programas que tú necesites y servirá únicamente tus páginas web y las de nadie más, con lo que todos sus recursos de potencia, ancho de banda, etc, estarán únicamente a tu disposición y la de tus visitantes. Después hablaremos más sobre esta opción, que, hoy por hoy, puede ser la ideal para muchos de nosotros.
¿Las demás personas, empresas, webmasters... qué criterios tienen en cuenta a la hora de decidir dónde alojar sus sitios web, por cuáles optan finalmente, qué se considera "lo importante" a la hora de elegir?
Un estudio de Forrester Research nos indica que la falta de recursos y conocimientos necesarios dentro de la empresa es la primera causa (66%) por la cual una empresa decide contratar este servicio con un proveedor. Las siguientes razones son las preocupaciones por la conectividad y network (31%), la seguridad (10%), la integración a medida (7%) y finalmente el costo (3%).
Estos son los puntos que el comprador revisa antes de escoger su proveedor:
Conectividad confiable --------------------- 69%
Servicio al cliente --------------------------- 14%
Aplicaciones / Integración a medida ---------14%
Seguridad ------------------------------------- 3%
Ahora que tenemos una idea
general, veamos más en detalle las diferentes alternativas de que disponemos
para alojar nuestros sitios web, cuándo resulta adecuada cada una de ellas y
cuáles son sus pros y sus contras.
1.- ALOJAMIENTO VIRTUAL
Ese tan baratito que nos alquila, e incluso regala, cualquier proveedor de servicios e incluso lugares como Geocities y otros mil más. Es indiferente el hecho de que dispongas o no de dominio propio, el servidor sigue siendo igual de virtual, o sea, es compartido y no tienes ningún poder decisorio sobre su configuración o software.
A favor-:
El precio. Si el sitio es pequeño y sencillo es una alternativa barata y que satisfará sus necesidades, mientras no se haga muy complejo.
En contra:
Se comparte un servidor con muchas más empresas, por lo tanto, otros sitios más complejos y de mayor tráfico pueden disminuir la velocidad de accesibilidad al sitio web de las demás empresas.
No se tiene acceso al servidor.
Limitaciones en el espacio
de disco duro disponible, transferencia de ancho de banda, opciones de software.
2.- SERVIDOR PROPIO en las instalaciones de la empresa
A favor:
Control total sobre el servidor.
En contra:
Es una alternativa muy costosa y sólo las grandes empresas pueden hacer este tipo de inversión.
Implica la necesidad de adquirir líneas redundantes de conectividad de alta velocidad a Internet.
Requiere técnicos
especializados dentro de la empresa.
3.- SERVIDORES DEDICADOS
A favor:
Servidor alquilado dedicado al uso exclusivo de la empresa que lo contrata como si fuese su propio servidor.
Si el hardware se estropea la sustitución es responsabilidad del proveedor.
Acceso directo al servidor por medio de una contraseña para acceder al root y control total.
No existen limitaciones en cuanto al software que el cliente desee instalar.
No hay restricciones geográficas.
Dominios y cuentas de correo ilimitados.
El precio no es excesivo y si tienes que alojar tres o más sitios será incluso más económico que un servidor virtual.
En contra:
Si elegimos un proveedor fiable y adecuado es difícil encontrar fallos.
¿Y cómo no equivocarnos? ¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de escoger un
servidor dedicado?
Es preciso asegurarse de que el proveedor del servidor es fiable y tiene líneas redundantes de conectividad (Líneas dedicadas de conectividad T3 son líneas dedicadas de alta velocidad de conexión a los backbones o vértebras de Internet. Es muy importante tener líneas redundantes porque si alguna de las redes tiene un problema el servidor seguirá conectado a Internet mediante las otras.)
Es imprescindible que el proveedor nos facilite soporte técnico las 24 horas del día y todos los días del año. Que realice monitoreos constantes, backups frecuentes... Al fin y al cabo, con un fallo de unas pocas horas podemos sufrir grandes pérdidas.
Lo óptimo es acudir a un proveedor que no venda paquetes preconfigurados a los cuales tengamos que adaptarnos y que generalmente nos obligan a pagar más de lo que necesitamos. Lo ideal es poder escoger una a una las características de nuestro servidor, del mismo modo que si lo montáramos nosotros mismos. Así obtendremos una máquina más nuestra y totalmente personalizada.
Además, el proveedor debe garantizarme que el servidor se adecuará siempre a mis necesidades, tanto las presentes como las futuras. Puede ser que a la hora de alquilarlo disponga sólo de tres sencillos dominios con un tráfico de unas 60.000 visitas y me baste con una configuración mínima, pero, cuando dentro de unos meses ese tráfico aumente, necesite instalar enormes bases de datos, más potencia, más memoria, debo tener garantizado que el proveedor me dará más ancho de banda, sustituirá el procesador por otro más potente, ampliará la memoria... A esto se le denomina escalabilidad del servidor.
La veterana empresa Rackspace, líder en el sector de los servidores dedicados, cumple sobradamente con estos requerimientos (http://www.rackspace.com ). Su centro de telecomunicaciones es una especie de Fort Nox que protege los cientos de servidores que alberga bajo estrictas e impresionantes medidas de seguridad que incluyen tarjetas de acceso, códigos y escaneador biométrico (escanear la palma de la mano en tercera dimesión) y cuenta, por supuesto, con protección frente a posibles fallos del servicio eléctrico (conectividad redundante de UPS - Uninterrupted Power Supply - y un generador de diesel de 750 kw).
Tras solicitarles más información de sus servicios nos envían un amplio informe que incluye, además de las características que mencionábamos más arriba como necesarias, otras tan sobresalientes como éstas:
- Record de conectividad de 99.999%
- Centro de telecomunicaciones conectado a líneas múltiples desde DS3 hasta OC12.
- Firewalls, detección de intrusión y monitoreo y auditoría de seguridad.
- Monitoreo constante de los servidores, aplicaciones, network y actividad de Internet.
- Respaldos diarios y semanales opcionales con archivación en cajas de seguridad a prueba de fuego fuera de las instalaciones.
A pesar de estar ubicados en Texas cuentan con clientes en 40 países, y, de hecho, el 45% de su clientela es internacional. Presumen de un excelente servicio al cliente, que empieza ya desde que te asomas a sus páginas web e inmediatamente te encuentras con la posibilidad de poder charlar en vivo y en directo con un asesor que disipará en tiempo real las posibles dudas que puedas tener. Y no temas dirigirte a ellos en español via email, para parte de su personal es su lengua natal.
Muy bonito. Pero, ¿cuánto cuesta esto? Depende de lo que necesites, de si tienes 20.000 visitas mensuales o 200.000 diarias, de si quieres un disco duro o tres, etc. La configuración más sencilla en un servidor UNIX cuesta unas 20.000 pesetas mensuales (139´84 dolares) y te servirá para varios dominios funcionando con una misma IP sin cargo extra, o todas las IP´s que quieras por un poco más. Rackspace dispone de un servicio de cotizaciones en línea, no tienes más que decidir lo que necesitas y al instante sabrás lo que cuesta, y, si no sabes muy bien lo que quieres, simplemente haz click sobre el icono "Live Person" y alguien acudirá en tu ayuda.
Como vemos, por el precio de tres dominios por los que hayamos de pagar servidores virtuales ya podemos tener uno dedicado. Toda una tentación.