Las 11 leyes inmutables del Branding en Internet.
http://pyme.net.uy/documentos/leyes_branding.asp

Estos once puntos han sido recogidos del libro del mismo título "Las 11 leyes inmutables del Branding en Internet", escrito por Al Ries y Laura Ries. El libro está principalmente enfocado hacia grandes compañías que esperan conseguir un gran reconocimiento en Internet a escala internacional, por lo que dichas las leyes no pueden considerarse del todo "inmutables" cuando se trata de pymes.

1.      La Ley de la Novedad/Continuidad sostiene que entrar en Internet debe plantearse como un negocio totalmente nuevo, no como un nuevo medio en el que desarrollar un negocio ya existente. Esto no quiere decir que una empresa real no pueda entrar en Internet, sino que suele ser un error intentar trasladar un negocio a la Red sin adecuarlo a las características y peculiaridades del medio. Quizás por esta razón las marcas más fuertes de Internet, como Amazon.com o eBay.com son empresas que han nacido para Internet y, en consecuencia, están absolutamente adaptadas a ese medio.

2.      La Ley de la Interactividad expone que un sitio web debe ser interactivo para tener éxito. La interactividad no debe limitarse a ofrecerle al internauta la posibilidad de seleccionar en un menú lo que desee, sino a aprovechar las posibilidades del medio para aprender de los visitantes con el fin de ofrecerles lo que demandan. Cada vez más, los sitios web están ofreciendo un Servicio de Atención al Cliente on-line vía chat personalizado o incluso mediante un servicio de voz sobre IP.

3.      La Ley del Nombre Común dice que un nombre simple como Art.com o Advertising.com son marcas débiles. Sin embargo, esto no es del todo cierto. Por ejemplo, ArtUFrame.com dobló sus ventas cuando compró art.com. La realidad es que un nombre excesivamente genérico no suele decir demasiado respecto a la actividad de la web.

4.      La Ley del Nombre Específico sostiene que un nombre relacionado con la actividad es preferible a uno general. Esta es la otra cara de la ley número tres. Los autores sostienen que un buen nombre debe tener la mayoría de estas características: (1) corto, (2) sencillo, (3) relativo a la actividad del sitio, (4) único, (5) no literario, (6) pronunciable, (7) impactante y (8) personalizado.

5.      La Ley de la Singularidad afirma que mientras en el mundo real hay sitio para una segunda marca en cualquier sector, en Internet sólo hay sitio para una marca. Es por esto que los negocios pequeños deben dirigirse a nichos de mercado muy especializados en los que puedan ser números uno.

6.      La Ley de la Publicidad indica que la publicidad fuera de Internet debe ser mucho mayor que la publicidad en Internet, aunque en este último caso se refiere exclusivamente a la publicidad por banners, sin hacer apenas mención a otras herramientas potentísimas, como el e-mail marketing. Evidentemente, esta es una de las leyes que únicamente se puede aplicar a grandes corporaciones con abultados presupuestos de publicidad.

7.      La Ley de la Globalización admite que Internet destruirá todas las barreras y fronteras entre países. Un hecho indiscutible que ya se está produciendo.

8.      La Ley del Tiempo sostiene que la marca que ocupa el primer lugar en la mente del consumidor tiene ventaja, pero no necesariamente ocupa el primer lugar en el mercado.

9.      La Ley de la Vanidad dice que no se deben incluir más y más categorías sobre una misma marca. El concepto que se propugna es: especialización contra diversificación.

10.  La Ley de la Divergencia va en contra de la obsesión actual sobre la convergencia del teléfono, televisión y PC. Siguiendo este mismo principio, las marcas de Internet basadas en servicios "todo en uno" estarían en contra de las leyes de la naturaleza de Internet.

11.  La Ley de la Transformación dice que Internet transformará todos los aspectos de nuestras vidas. Algunos ejemplos de estos cambios los estamos viendo ya en los catálogos en papel, los folletos a color, la industria telefónica, los anuncios clasificados, el volumen de correo ordinario, los servicios financieros, etc.

Tomado de Albanova.com