E-mail marketing:
publicidad a la carta.
http://www.marketingycomercio.com/n20ene01/26ene01.asp
El e-mail es cada vez una práctica más utilizada por las empresas para
publicitar sus productos. Sin embargo, esto puede ser un arma de doble filo si
no se realiza una campaña inteligente. Prácticas como el spam, o envío masivo de
correos electrónicos, pueden perjudicar a este tipo de publicidad haciendo que
nuestros anuncios terminen en la papelera de reciclaje sin haber sido leídos.
La asociación norteamericana MAPS (Mail Abuse Prevention System) dicta unas
normas básicas para prevenir que nuestra campaña pueda incurrir en esta práctica
intrusiva. En primer lugar, antes de comenzar el envío, debemos confirmar y
verificar las direcciones de los nuevos suscriptores. De esta manera, mantenemos
limpia nuestra base de datos y nos aseguramos de que nuestros correos siempre
sean recibidos por el destinatario.
El principio básico para el e-mail marketing es el consentimiento del receptor.
Al redactar el correo, la asociación aconseja facilitar al usuario una manera
para darse de baja además de una dirección de contacto fuera de los métodos
electrónicos. Al usuario también debemos informarle de cómo van a usarse sus
datos, respetando todas las normas de privacidad, y de la frecuencia con la que
va a recibir la publicidad.
Una vez cumplidos estos requisitos, tan sólo tendremos que preocuparnos de hacer
atractivo el contenido de nuestros anuncios. La propia fórmula del e-mail
permite personalizar el mensaje o, al menos, segmentar audiencias. Además,
cuanto más personalizado sea el contenido, más interés despertará en el usuario
y posible cliente. El objetivo no debe ser sólo que el usuario visite la web,
además debemos intentar que se registren en nuestras páginas y que, incluso,
hagan el pedido del catálogo.
Por otro lado, podemos aprovechar las ventajas del medio y diseñar la campaña en
HTML, lenguaje que permite sacar partido de todas las posibilidades de imagen,
diseño y programación de la web.
Como formatos, las newsletter son la mejor opción para introducir el e-mail
marketing. Según diversos estudios, la cuota de respuesta que recibe este tipo
de mensajes y la publicidad insertada en ellos se sitúa entre el 10 y el 15%.
Además, por norma general, un 70% de las newsletters electrónicas son leídas por
los destinatarios. Otra fórmula que comienza a extenderse es el endorsement, es
decir, asociarse a una empresa con una amplia base de datos que distribuya
nuestra publicidad y que además aporte imagen de calidad a nuestros envíos.